Nemluvím Convenon

Si ya ofrecimos nuestra primera crónica de un concierto, y más aun, podemos decir que se cocina la segunda, ahora vamos allá con la primera critica de una reciente publicación sonora, que musical es mucho decir, del malogrado ente sonoro que se hace conocer como Nemluvím Convenon, (pinchen y escuchen).

Sólo una constante e inconsciente falta de lúpulo en la sangre puede explicar la caída en picado de nuestro malogrado descompositor. Él, que rozara la exquisitez con los fatalmente fallidos Anhelos Anélidos y la profunda renovación del panorama musical que ellos supusieron.

En este caso nos regala cuatro descomposiciones de menos de dos minutos las cuales componen su reciente paquete de esperpentos musicales que lejos de aquel glorioso Melon´s Love, acaso único momento de genialidad del autor, quedan en simples anécdotas efímeras e inverosímiles, más allá de lo hecho por aquellas simpáticas lombrices de ultratumba.

Sonido ajeno y enajenado producido por su infructuosa computadora que aun arrojada al suelo con saña, continúa maltratando e insultando, en, y por todos los medios, en fondo y forma, a cualquier alma sensible amante del arte, de la elegancia y del buen hacer.

Pero no todo van a ser descalificaciones hacia este destructor de melodías, a su favor podemos decir que tiene un gran vecino.